Reseña de: El castillo ambulante

Título original: Howl's Moving Castle
Autor: Diana Wynne Jones
Traducción: David Cruz Acevedo
Género: Fantasía, Juvenil/infantil

Sinopsis: En el país de Ingary, donde las botas de siete leguas y las capas de invisibilidad existen de verdad, Sophie Hatter ha atraído la desagradable atención de la Bruja del Páramo, quien la hechiza con un maleficio que la convierte en una anciana. Con la firme determinación de hacer lo más adecuado, Sophie viaja al único lugar en el que cree que podrá encontrar ayuda, el castillo ambulante que merodea por las colinas cercanas. Pero el castillo pertenece al temible Mago Howl, que se alimenta, según dicen, de los corazones de jóvenes desprevenidas. 

"Diana Wynne Jones se ha superado a sí misma: una traviesa y romántica mezcla de humor, magia y fantasía." Publisher Weekly

Hoy quiero comenzar hablando de la importancia de nuestro humor a la hora de la lectura, también de nuestra disposición hacia el libro en cuestión. Porque, al menos en mi caso, hay veces que odio un libro sin razones aparentes, o lo adoro cuando sé que incluye cosas que critico mucho de otros.

Con El castillo ambulante fue un poco el segundo caso, ya que es realmente un libro MUY sencillo. No se me ocurre una palabra que lo describa mejor, excepto tal vez 'bonito', porque de verdad que es sencillo en todas sus partes. Obviamente tiene sentido, porque el público al que va dirigido no va a esperar una trama oscura y complicada, con personajes que cueste entender y que al final el sentido del libro te venga a la mente después de un tiempo de digestión, si es que lo tiene o lo notas.

Al contrario, entiendo que el propósito de este libro es que pases un rato divertido y relajado, que puedas leerlo en pedacitos y que todo siga teniendo sentido. Además de que la autora hizo un trabajo fantástico poniendo todo junto. No sé, quiero culpar a mi humor por el hecho de querer ponerle cinco huellitas a un libro con una narración tan sencilla, pero la verdad es que la única razón es que el libro funciona, y funciona bien.

Pero bueno, entrando en materia: los personajes. La protagonista es Sophie, la mayor de tres hermanas. Por ser la mayor le espera una vida sin aventuras ni nada interesante, ella lo sabe y está resignada a ello, por eso Sophie es un personaje mayormente triste, aunque en el fondo es mucho más vivaz de lo que está dispuesta a admitir, la historia está narrada desde su perspectiva. Un personaje clave es Howl, el mago gracias al cual el castillo ambulante existe. De entrada se nos dice que es un mago malísimo, un villano de esos que cortan la leche con mencionarlos, a medida que avanzamos en el libro vamos descubriendo los rasgos tan extravagantes de su personalidad, así como sus intensiones. 

Otros personajes que entran mucho en la historia son Michael, el aprendiz de Howl y Calcifer, su demonio de fuego, no sabría decir cuál de ellos es más significativo, porque en realidad todos los personajes tienen su papel en la trama y gracias a ellos se conectan todos los elementos que Diana Wynne Jones mete al libro. Michael es un chico algo tímido, no muy decidido, y Calcifer es terco como mula, incluso hasta travieso. 

El villano 'fuerte' de la trama es la Bruja del Páramo, porque para empezar fue ella la que hizo que Sophie acabara siendo una vieja. También están las hermanas de Sophie y su madre, el príncipe Justin, el rey, el espantapájaros...hay muchos personajes. Muchos. Y la autora se las ingenia para unirlos a todos y con ellos tejer su historia.

Con lo que entro a la trama, en sí no tiene complicaciones. La historia avanza de manera lineal, conectando los capítulos de manera directa, así como a sus personajes. La magia de la trama es que son muchas partes, si pienso en todo lo que pasó es increíble que todo se uniera de manera tan natural que no me cuestionara cómo era que tenía sentido, y que pasaran tantas cosas, involucrando a tantos personajes, en un libro tan pequeño. Pequeño entre comillas, porque tiene como 300 páginas.

Otra cosa linda sobre el libro es que está dividido en capítulos, cada capítulo tiene una especie de cabecera en la que nos dice en pocas palabras de qué va -no sé por qué eso me huele a infancia-, y cada uno de ellos es una especie de bloque en la historia.

Empezamos con la vida de Sophie antes de su encuentro con la Bruja del Páramo, conocemos un poco a sus hermanas, los problemas de Sophie y su forma de afrontarlos, en otras palabras: las cosas que llevan a la historia adelante. Luego nos vamos de capítulo en capítulo, de extrañeza en extrañeza, conociendo más sobre el mundo en el que se desarrolla la historia. De primera lectura parece como si fuera al azar y que la autora no nos está llevando a ninguna parte, es hasta que ya está muy avanzado que se junta todo y se nota mejor cómo está estructurado todo. 

En eso es curioso, porque a pesar de que no hubo nada revolucionario en el libro es como si fuera así. Quiero decir, Howl es masomenos como esperaba que fuera, lo mismo para todos los demás. Era de esperarse que los conflictos que surgieron fueran a aparecer. El final también era de esperarse. Pero aún así me sentí- si no sorprendida-  satisfecha.

En fin, tengo un calendario apretado porque no he terminado con la escuela - ni lo haré pronto - y he ido juntando libros para el verano, pero trataré de hacerle un hueco a este libro. Se lee rápido y no es como si fuera un dolor hacerlo, así que tal vez en la segunda vuelta aclare más mis sentimientos sobre él. Con la primera lectura sólo puedo decir que me encantó y que si de mi dependiera que todos lo leyeran, ya tendrían un ejemplar en sus manos.

En resumen, El castillo ambulante es un libro para leerse cuando quieres alivianar tu vida, tiene personajes sencillos, pero acordes a la línea de la trama. En fin, es divertido y bonito de leer, a pesar de ser tan simple.