Autor: Christina Dodd, Stephanie Laurens, Julia Quinn, Karen Ranney
Traducción: Margarita Cavándoli Menéndez
Género: Romántica
Sinopsis: Cuatro jóvenes hermosas van rumbo al altar en una tierra de pasiones intensas y belleza salvaje. Las voces más brillantes del romance histórico se unen para traernos cuatro historias de pasiones arrebatadoras y amores intensos.
BAJO LA MANTA ESCOCESA
Según la tradición, todo hombre que cubra a su novia con el tartán tendrá un buen matrimonio, pero hará falta una noche a solas para que esta pareja tenga un final feliz.
UNA ROSA EN FLOR
De niña, Rose era una espina clavada en el costado del conde de Strathyre. Ahora se ha convertido en una bella mujer que lo vuelve loco.
GRETNA GREENE
Empeñada en impedir que su hermano contraiga matrimonio, Margaret acaba en brazos de un escocés guapo e insoportable decidido a enseñarle las lecciones de la vida.
LA NOVIA DE GLENLYON
Lachlan está convencido de que ha conocido a la mujer perfecta. Pero surge un pequeño problema, puesto que Ealasaid, su flamante esposa, no es exactamente quien dice ser.
BAJO LA MANTA ESCOCESA
Según la tradición, todo hombre que cubra a su novia con el tartán tendrá un buen matrimonio, pero hará falta una noche a solas para que esta pareja tenga un final feliz.
UNA ROSA EN FLOR
De niña, Rose era una espina clavada en el costado del conde de Strathyre. Ahora se ha convertido en una bella mujer que lo vuelve loco.
GRETNA GREENE
Empeñada en impedir que su hermano contraiga matrimonio, Margaret acaba en brazos de un escocés guapo e insoportable decidido a enseñarle las lecciones de la vida.
LA NOVIA DE GLENLYON
Lachlan está convencido de que ha conocido a la mujer perfecta. Pero surge un pequeño problema, puesto que Ealasaid, su flamante esposa, no es exactamente quien dice ser.
Y pues este es el libro que me llevé por error de la biblioteca. No sé por qué lo tenía en mi papelito con los libros para mis retos, pero pasó y decidí leerlo de todas formas. La mala noticia es que, como siempre, descubrí hasta días después que el libro es parte de una serie. En este caso son dos libros y aparentemente Cuatro novias va después de A Well Pleasured Lady y A Well Favored Gentleman. Por esos títulos ya sabrán en dónde me metí.
Como son cuatro relatos cortos de autoras diferentes dividiré la reseña.
Bajo la manta escocesa
Este primer relato me hizo lamentar muchísimo la decisión de no devolverlo a la biblioteca. Comienza bien, de hecho me gustó la forma en que la autora trabaja con sus personajes. Están bien escritos y diferenciados a pesar de las poquísimas páginas que tiene -como 80, no recuerdo bien-, lo malo es que para la trama no quedó tiempo.
Los protagonistas son Hadden Fairchild, un historiador inglés y Andra MacNachtan, una castellana escocesa. Él es una especie de prototipo masculino, con todo y la ironía que suele caracterizar a estos personajes. Ella es la clásica mujer señora de su casa, pero cuyos siervos la vieron crecer. Osea que la trama va de que Hadden quiere conquistar a Andra, pero ella aprecia mucho su libertad y lo único que le preocupa es mantener a flote a su gente.
Este primer relato me hizo lamentar muchísimo la decisión de no devolverlo a la biblioteca. Comienza bien, de hecho me gustó la forma en que la autora trabaja con sus personajes. Están bien escritos y diferenciados a pesar de las poquísimas páginas que tiene -como 80, no recuerdo bien-, lo malo es que para la trama no quedó tiempo.
Los protagonistas son Hadden Fairchild, un historiador inglés y Andra MacNachtan, una castellana escocesa. Él es una especie de prototipo masculino, con todo y la ironía que suele caracterizar a estos personajes. Ella es la clásica mujer señora de su casa, pero cuyos siervos la vieron crecer. Osea que la trama va de que Hadden quiere conquistar a Andra, pero ella aprecia mucho su libertad y lo único que le preocupa es mantener a flote a su gente.
Comienza con Hadden-protagonista masculino- hablando con su tía, que le reclama por sus modales, ya que Andra-protagonista femenina- no le habló de la super legendaria manta escocesa nupcial. Porque al parecer Andra está en posesión de la única manta escocesa nupcial de todo el mundo, una reliquia familiar de la que su clan siempre ha estado encantado de alardear. En este momento no puedo dejar de poner mi mejor cara de Doge, porque realmente este argumento se siente así. Very manta escocesa nupcial. Much drama. So love.
Pero el detalle que se lleva las palmas en cuanto a falta de tiempo fue el final. Fue un corte, literalmente, de la historia. Estaban pasando cosas que daban a entender que iba a ser un hilo secuencial mucho más largo, pero de la noche a la mañana ya estaba todo solucionado. Puf. Llegamos al final del complicadísimo proceso de cotejo de Hadden con Andra, olvidados los principios y los problemas, con una última aparición estelar de la dichosa manta escocesa nupcial.
Una rosa en flor
Después de leer este relato tuve la sospecha de que acordaron escribir alrededor de alguna idea. En el primero es la manta escocesa nupcial, porque la autora la mete hasta en la sopa. En el caso del segundo relato la idea es "la espina clavada en las carnes" de Duncan, el conde de Strathyre. Juro que la autora no soltó esta frase en ningún momento, tal vez no habría sido tan malo si estuviera distribuida en un libro largo, pero en este cuentito aparece cada vez que hablan de la protagonista.
El protagonisto es Duncan, que lleva diez años trabajando duro para recuperar el esplendor de su condado, que estaba al borde de la ruina-o algo así- y la protagonista es Rose, una amiga de la infancia. No sé si tenía algún título, pero la autora sí menciona que viene de una familia acaudalada. Se conocen porque Rose pasaba todos los veranos en la finca de la familia de Duncan y se dedicaba a atormentarlo, razón por la cual desconfía de ella.
Pero llevaban doce años sin verse, porque Duncan se fue a quién sabe donde -¿Edimburgo?- a hacer negocios para que su familia volviera a ser rica. Se reencuentran en ocasión del solsticio, otra de las muletillas de la autora: la noche más corta del año. Que me parta un rayo si vuelvo a leer eso una vez más. Como sea, el problema de este relato es que ambos llevan a sus posibles de prometidos a la finca de los Strathyre, y se supone que el solsticio les dirá si deben o no casarse.
Este relato está más centrado en el "aspecto carnal", no pasó ni un párrafo sin que fuera patente que Duncan quería acostarse con Rose y está repleto de menciones al respecto. Por cierto, aprendí una nueva palabra: ebúrneo. Es la primera vez que la veo en mi vida y significa "del color del marfil", obviamente la usa para describir los pechos de Rose. No sé qué más podría decir sobre Una rosa en flor.
Gretna Greene
Llegada a este punto me siento muy mal, porque es totalmente mi culpa ponerme a leer algo que estoy segura que no me va a gustar, pero es que Gretna Greene es la razón por la que le hago fuchi a los libros románticos. Está bien que son poquísimas páginas, pero al menos en los otros dos las autoras dejaron ver que los protagonistas se conocían, aunque fuera de un par de meses o así. En este se conocieron una noche y a la tarde del día siguiente ya estaban casados, ¿necesito decir por qué eso está mal? ¿de verdad hay gente capaz de eso? Es la única razón que se me ocurre para que este horrible tópico del demonio siga siendo tan popular. Lo siento muchísimo por la autora, pero yo no soy la clase de lectora que se queda conforme con el argumento choteado de las almas gemelas y blablabla.
En fin, los protagonistas son Angus Greene y Margaret Pennypacker. Y la situación es la siguiente: el hermano menor de Margaret se fugó para casarse con alguna de sus novias y la hermana menor de Angus se escapó para pasar la temporada en Londres. Angus es escocés y Margaret es inglesa. Y Gretna Greene parece ser el lugar al que todas las parejas escapadas llegan, una especie de Las Vegas escocesa. Margaret viaja sola de Inglaterra a Escocia y Angus tiene que salvarla de unos sujetos que trataron de violarla, como es un caballero se encarga de alquilar habitación en una posada y cuidar de ella hasta el día siguiente.
Aquí es donde empiezan los problemas. Los personajes están bien, eran graciosos y la velada que pasaron fue aceptable en cuanto a escritura. Hasta entiendo que Angus se enamorara de Margaret, es perfectamente normal que a un hombre le guste una mujer y todo eso, ¿pero EN SERIO era necesario que mencionaran que estaban discutiendo como si fueran un matrimonio de muchos años? Parece que un par de personas no se pueden llevar bien y ya, tienen que enamorarse y casarse y ser felices por siempre. Supongo que es un requisito en una novela romántica, pero no me gusta nada nada leer un insta-love. Es a secas lo que pasa cuando un autor no se quiere tomar la molestia de escribir. Vale que son menos de 100 páginas, pero por favor...
La otra cosa que quiero mencionar es la muletilla de este libro, es una frase que Angus repetía sin control: ¡Por Jesús, por el whisky y por Roberto I Bruce!
Aparentemente es algo muy escocés. Yo no sé nada de Escocia, ni siquiera podría jurar por mi vida que sé localizarlo en un mapa, pero reconozco cuando alguien está abusando de un estereotipo.
La novia de Glenlyon
Éste fue un poco más de lo mismo. Los protagonistas son Lachlan Sinclair y Janet MacPherson. Lachlan es señor de un lugar llamado Glenlyon-duh- y Janet es una doncella de compañía, osea que es el típico cuento del señor y la plebeya. Sus problemas son que las tierras de Lachlan sólo dan cebada y su ganado está muerto de hambre y que Janet es escocesa, pero sus papás se murieron y por viejos parientes le consiguieron un puesto en la casa del inglés cuyas tierras lindaban con las de Lachlan. Este señor inglés le propuso a Lachlan darle a su hija en matrimonio a cambio de que dejara de cruzar la frontera para robarle sus vacas.
Y Lachlan y Janet se conocen porque él sentía curiosidad por su prometida -Harriet, la típica señorita fina que menosprecia a la criada y es una bruja y todo-, así que una noche va a su casa a espiarla y se encuentra a Janet metida en un arroyo. La confunde con Harriet y se enamora de ella, sólo que pues no es su prometida.
Fuera de eso no hay mucho más, el "tema" de este relato es que un viejo del clan de Lachlan se cree adivino y le pronosticó que se casaría con "la novia de Glenlyon", que sería una mujer "con garras en lugar de pies y con voz de gemido" o algo por el estilo. También fue uno de esos casos en los que los protagonistas caen rendidos ante el amor, sólo que ni siquiera se vieron porque sus encuentros fueron todos de noche. Literalmente no sabía ni de qué color tenía el pelo hasta que se la llevó a su castillo y "se casaron".
No tengo mucho más que decir sobre este libro. Como mencioné al principio, Goodreads dice que es la continuación de dos libros que la verdad no planeo leer, supongo que por eso estos cuatro relatos cortos no tuvieron ningún sentido para mí. Es posible que los personajes de este libro sean relevantes en los anteriores, quizá explican alguna situación que ocurrió anteriormente o sean una especie de complemento, pero en cualquier caso no siento que leer Cuatro novias me haya dejado nada de provecho.
Es injusto porque lo pedí prestado por el simple hecho de que podía. No diré que es malo, pero no es de mi estilo. Y sólo por eso no negaré que existe la posibilidad de que les guste, aunque sea un poco...si no les molesta el insta-love, las escenas eróticas incómodas y las situaciones típicas.
Una rosa en flor
Después de leer este relato tuve la sospecha de que acordaron escribir alrededor de alguna idea. En el primero es la manta escocesa nupcial, porque la autora la mete hasta en la sopa. En el caso del segundo relato la idea es "la espina clavada en las carnes" de Duncan, el conde de Strathyre. Juro que la autora no soltó esta frase en ningún momento, tal vez no habría sido tan malo si estuviera distribuida en un libro largo, pero en este cuentito aparece cada vez que hablan de la protagonista.
El protagonisto es Duncan, que lleva diez años trabajando duro para recuperar el esplendor de su condado, que estaba al borde de la ruina-o algo así- y la protagonista es Rose, una amiga de la infancia. No sé si tenía algún título, pero la autora sí menciona que viene de una familia acaudalada. Se conocen porque Rose pasaba todos los veranos en la finca de la familia de Duncan y se dedicaba a atormentarlo, razón por la cual desconfía de ella.
Pero llevaban doce años sin verse, porque Duncan se fue a quién sabe donde -¿Edimburgo?- a hacer negocios para que su familia volviera a ser rica. Se reencuentran en ocasión del solsticio, otra de las muletillas de la autora: la noche más corta del año. Que me parta un rayo si vuelvo a leer eso una vez más. Como sea, el problema de este relato es que ambos llevan a sus posibles de prometidos a la finca de los Strathyre, y se supone que el solsticio les dirá si deben o no casarse.
Este relato está más centrado en el "aspecto carnal", no pasó ni un párrafo sin que fuera patente que Duncan quería acostarse con Rose y está repleto de menciones al respecto. Por cierto, aprendí una nueva palabra: ebúrneo. Es la primera vez que la veo en mi vida y significa "del color del marfil", obviamente la usa para describir los pechos de Rose. No sé qué más podría decir sobre Una rosa en flor.
Gretna Greene
Llegada a este punto me siento muy mal, porque es totalmente mi culpa ponerme a leer algo que estoy segura que no me va a gustar, pero es que Gretna Greene es la razón por la que le hago fuchi a los libros románticos. Está bien que son poquísimas páginas, pero al menos en los otros dos las autoras dejaron ver que los protagonistas se conocían, aunque fuera de un par de meses o así. En este se conocieron una noche y a la tarde del día siguiente ya estaban casados, ¿necesito decir por qué eso está mal? ¿de verdad hay gente capaz de eso? Es la única razón que se me ocurre para que este horrible tópico del demonio siga siendo tan popular. Lo siento muchísimo por la autora, pero yo no soy la clase de lectora que se queda conforme con el argumento choteado de las almas gemelas y blablabla.
En fin, los protagonistas son Angus Greene y Margaret Pennypacker. Y la situación es la siguiente: el hermano menor de Margaret se fugó para casarse con alguna de sus novias y la hermana menor de Angus se escapó para pasar la temporada en Londres. Angus es escocés y Margaret es inglesa. Y Gretna Greene parece ser el lugar al que todas las parejas escapadas llegan, una especie de Las Vegas escocesa. Margaret viaja sola de Inglaterra a Escocia y Angus tiene que salvarla de unos sujetos que trataron de violarla, como es un caballero se encarga de alquilar habitación en una posada y cuidar de ella hasta el día siguiente.
Aquí es donde empiezan los problemas. Los personajes están bien, eran graciosos y la velada que pasaron fue aceptable en cuanto a escritura. Hasta entiendo que Angus se enamorara de Margaret, es perfectamente normal que a un hombre le guste una mujer y todo eso, ¿pero EN SERIO era necesario que mencionaran que estaban discutiendo como si fueran un matrimonio de muchos años? Parece que un par de personas no se pueden llevar bien y ya, tienen que enamorarse y casarse y ser felices por siempre. Supongo que es un requisito en una novela romántica, pero no me gusta nada nada leer un insta-love. Es a secas lo que pasa cuando un autor no se quiere tomar la molestia de escribir. Vale que son menos de 100 páginas, pero por favor...
La otra cosa que quiero mencionar es la muletilla de este libro, es una frase que Angus repetía sin control: ¡Por Jesús, por el whisky y por Roberto I Bruce!
Aparentemente es algo muy escocés. Yo no sé nada de Escocia, ni siquiera podría jurar por mi vida que sé localizarlo en un mapa, pero reconozco cuando alguien está abusando de un estereotipo.
La novia de Glenlyon
Éste fue un poco más de lo mismo. Los protagonistas son Lachlan Sinclair y Janet MacPherson. Lachlan es señor de un lugar llamado Glenlyon-duh- y Janet es una doncella de compañía, osea que es el típico cuento del señor y la plebeya. Sus problemas son que las tierras de Lachlan sólo dan cebada y su ganado está muerto de hambre y que Janet es escocesa, pero sus papás se murieron y por viejos parientes le consiguieron un puesto en la casa del inglés cuyas tierras lindaban con las de Lachlan. Este señor inglés le propuso a Lachlan darle a su hija en matrimonio a cambio de que dejara de cruzar la frontera para robarle sus vacas.
Y Lachlan y Janet se conocen porque él sentía curiosidad por su prometida -Harriet, la típica señorita fina que menosprecia a la criada y es una bruja y todo-, así que una noche va a su casa a espiarla y se encuentra a Janet metida en un arroyo. La confunde con Harriet y se enamora de ella, sólo que pues no es su prometida.
Fuera de eso no hay mucho más, el "tema" de este relato es que un viejo del clan de Lachlan se cree adivino y le pronosticó que se casaría con "la novia de Glenlyon", que sería una mujer "con garras en lugar de pies y con voz de gemido" o algo por el estilo. También fue uno de esos casos en los que los protagonistas caen rendidos ante el amor, sólo que ni siquiera se vieron porque sus encuentros fueron todos de noche. Literalmente no sabía ni de qué color tenía el pelo hasta que se la llevó a su castillo y "se casaron".
No tengo mucho más que decir sobre este libro. Como mencioné al principio, Goodreads dice que es la continuación de dos libros que la verdad no planeo leer, supongo que por eso estos cuatro relatos cortos no tuvieron ningún sentido para mí. Es posible que los personajes de este libro sean relevantes en los anteriores, quizá explican alguna situación que ocurrió anteriormente o sean una especie de complemento, pero en cualquier caso no siento que leer Cuatro novias me haya dejado nada de provecho.
Es injusto porque lo pedí prestado por el simple hecho de que podía. No diré que es malo, pero no es de mi estilo. Y sólo por eso no negaré que existe la posibilidad de que les guste, aunque sea un poco...si no les molesta el insta-love, las escenas eróticas incómodas y las situaciones típicas.
Angie
A mi me encanta la novela romántica y quizás más adelante me anime con estos relatos.
ResponderBorrarGracias por tu reseña y feliz fin de semana!
¡Hola!
BorrarLa verdad no me consta, pero me imagino que leer los primeros libros es importante. Éstos me dejaron la impresión de que son una especie de bonus, no sé. Espero que te guste, realmente no son malos.
Nos leemos y gracias por pasarte :D