Autor: Jamie McGuire
Traducción: Julia Alquézar
Libro: 1/3
Formato: Tapa blanda con solapas
Páginas: 448
Género: Ficción, Romance, Contemporáneo, New Adult
Sinopsis: LA CHICA BUENA
Abby Abernathy no bebe, no se mete en líos y trabaja muy duro. Cree que ha enterrado su oscuro pasado, pero cuando llega a la universidad, un rompecorazones conocido por sus ligues de una noche pone en jaque su sueño de una vida.
Travis Maddox, sexy, musculoso y cubierto de tatuajes, es justamente el tipo de chico que le atrae a Abby. Y precisamente lo que quiere evitar. Dedica sus noches a ganar dinero en un club de lucha itinerante, y en sus días a ser el estudiante ejemplar y el seductor más popular del campus. Una mezcla explosiva.
Intrigado por el rechazo de Abby, Travis intenta colarse en su vida proponiéndole una apuesta que trastocará sus mundos y lo cambiará todo.
En cualquier caso, Travis no tiene la más mínima idea de que ha iniciado un tornado de emociones, obsesiones y juegos que les terminará haciendo daño..., aunque puede que también los una para siempre.
Abby Abernathy no bebe, no se mete en líos y trabaja muy duro. Cree que ha enterrado su oscuro pasado, pero cuando llega a la universidad, un rompecorazones conocido por sus ligues de una noche pone en jaque su sueño de una vida.
EL CHICO MALO
Travis Maddox, sexy, musculoso y cubierto de tatuajes, es justamente el tipo de chico que le atrae a Abby. Y precisamente lo que quiere evitar. Dedica sus noches a ganar dinero en un club de lucha itinerante, y en sus días a ser el estudiante ejemplar y el seductor más popular del campus. Una mezcla explosiva.
¿UN DESASTRE INMINENTE...
Intrigado por el rechazo de Abby, Travis intenta colarse en su vida proponiéndole una apuesta que trastocará sus mundos y lo cambiará todo.
...O EL INICIO DE ALGO MARAVILLOSO?
En cualquier caso, Travis no tiene la más mínima idea de que ha iniciado un tornado de emociones, obsesiones y juegos que les terminará haciendo daño..., aunque puede que también los una para siempre.
Estos libros llevan mucho tiempo siendo populares, tanto así que jamás los veo en la biblioteca. Y pues por eso lo saqué, sentí que iba a ser mi última oportunidad o algo por el estilo, porque lo encontré en el carrito de acomodo. En fin, cuando leí la última página esperaba tener muchas emociones, pero simplemente no pasó. Tampoco es que sea rarísimo, a veces un libro tarda en arraigar y las reacciones se demoran un poco. El problema es que pasaron horas y nada, ya pasaron días y sigue muerto el asunto.
Cuando fui a mi cuenta de Goodreads a calificarlo y comentarlo seguía igual. Hasta me puse a leer otros comentarios. Hay muchísimos comentarios malos, no me había tomado la molestia de verlos antes, pero al parecer esta es una de esas historias que amos u odias. La razón principal es que la relación entre los protagonistas no es sana.
Yo también opino que no es sana; aunque eso no es todo, la trama tampoco es buena y los personajes son estereotípicos y planos. Hay un montón de cosas que están mal en Maravilloso desastre, puedo pasar horas diciendo todo lo que no me gustó. Pero aún así al final sólo estaría recordando detalles que me parecieron chocantes, en lugar de escribir "reacciones". Sinceramente puedo decir que quedé indiferente ante este libro. He seguido varias trilogías que no me gustaban sólo porque siento el impulso tonto de terminar, pero con ésta ni siquiera he sentido la curiosidad suficiente para ir a ver cómo se llama el segundo libro. Lo sabré hasta que busque la portada para ponerla abajo de "Otros libros de la saga".
Dicho eso, pasemos a los personajes. La protagonista es Abby, que se fue de su pueblo -¿Wichita?- con su prima América porque quería alejarse de su pasado, en el libro es la típica chica normal. Ya saben, está en la universidad y eso es sinónimo de decir que va a clase, las lleva masomenos y le gusta emborracharse y bailar, pero trata de mantener una imagen de chica tranquila ¿Cómo lo hace? Simple, se pone suéteres de punto. Boom, sabiduría de Jamie McGuire. Pero resulta que está traumada porque su papá le enseñó a jugar póker y resultó que es buena, lo malo es que su papá se hizo adicto a las apuestas y la culpa de sus problemas. En esto se resume este personaje: se cree el Cristo renacido del póker, invencible, a la vez que alega que quiere alejarse de ese estilo de vida y actúa como si tuviera todo el conocimiento del mundo en sus manos.
El otro protagonista es Travis. Aquí sí se chifló Jamie McGuire, Travis es perfecto en cualquier sentido superficial que quieran cubrir. Es inteligente -un genio-, súper fuerte, súper hábil, es invencible en las luchas, TODAS las chicas quieren con él, etc. Y todas esas cosas sin esfuerzo, sólo se menciona que estudie al principio porque ayudaba a Abby a pasar biología -sólo esa materia se saben aquí, oh, y cálculo-, jamás va al gimnasio, se jacta de no entrenar nunca y por supuesto que tampoco trabaja. Aún así tiene abdominales marcados y dinero suficiente para cosas caras y vivir como loco.
El resto de los personajes también puede describirse totalmente con pocas palabras. America es la chica chismosa, enamorada y fiestera. Shep es el primo de Travis, y él es la versión del chico maduro de este libro-el que les da whisky cuando tienen cruda/jaqueca/gripe/piojos-. Mick es el papá de Abby y es el clásico hombre inútil, va a pedirle dinero a Abby y luego desaparece de la historia. Blablabla.
Sobre la trama, se compone básicamente de un problema tonto, luego Abby se escapa, Travis se enoja o hace un berrinche, y al final Abby lo soluciona con sus poderes de tener suerte.
Una cosa que se me hizo extraña es la forma en que estos personajes beben. No es que yo sea una experta en vida loca universitaria, pero conozco gente "normal" y no se automedican bebiendo whisky por la mañana. Para todo se daban un vaso con "líquido ámbar", si estaban preocupados, si tenían resaca, si los habían golpeado, si estaban medio muertos...
Pero el dedo en la llaga de esta serie es la relación de Abby con Travis. Comienzan siendo amigos, porque Abby no quiere andar con él ya que le recuerda su pasado y le da miedo regresar. Como un tercio del libro se trata de Abby saliendo con otro chico mientras Travis se obsesiona con ella, todo porque America la llevó a vivir al departamento de los chicos porque ellos sí tenían agua caliente. Luego el resto es sobre cómo Abby hace sus cosas, pero Travis es muy posesivo y la asusta, cosa que le recuerda a Abby que no le gustan las apuestas-Travis vive de apuestas en peleas-, entonces ella decide dejarlo pero él no está dispuesto a eso. Dramas, alcohol y tienen sexo. Eso los regresa a su estado de enamorados por siempre. Y esa es básicamente su relación.
Entiendo que es algo insano, pero es que resulta tan ridículo que no puedo ni creérmelo de mentiritas. En serio que se la pasan gritándose y rompiendo cosas, o viéndose con deseo, o teniendo sexo. No puedo ni concebir que tengan lo que la autora dice que tienen y eso me cruza los cables.
No sé qué más decir, siento que me estoy repitiendo sin control. Yo no le recomendaría el libro ni a los fans del género, los personajes son muy simples, la trama no tiene emoción alguna; aunque lo intenta, hubo incendios, amenazas de muerte, un viaje exprés a Las Vegas y casi se mueren...
El final es lo peor. Creo que se supone que fuera algo muy emotivo, una especie de expresión de amor infinita. Pero recurre a la clásica narración en pasado en la que te cuentan los resultados de la última acción de los protagonistas, como si no fuera suficientemente malo.
¿Ya mencioné que Travis nunca la llama por su nombre? No tengo ni idea de cuántas malditas veces leí la palabra Paloma.
*ACTUALIZACIÓN* Después de años de haber escrito la reseña, de hecho vi las sinopsis de los otros dos libros de la trilogía. No son continuaciones, ni para eso dio la imaginación de la autora. El segundo libro es la versión narrada por Travis del primer libro y el tercero es lo que pasó en un viaje de America con Shep. Y además hay dos relatos intermedios, el 1.5 es lo más cercano a una continuación porque trata *SPOILER* del primer San Valentín de Abby y Travis luego de casarse *FIN DEL SPOILER* Y el 2.5 es sobre por qué diablos Abby pensó que era buena idea casarse al final. Ni me molestaré en incluir las portadas de esos libros en la reseña.
Cuando fui a mi cuenta de Goodreads a calificarlo y comentarlo seguía igual. Hasta me puse a leer otros comentarios. Hay muchísimos comentarios malos, no me había tomado la molestia de verlos antes, pero al parecer esta es una de esas historias que amos u odias. La razón principal es que la relación entre los protagonistas no es sana.
Yo también opino que no es sana; aunque eso no es todo, la trama tampoco es buena y los personajes son estereotípicos y planos. Hay un montón de cosas que están mal en Maravilloso desastre, puedo pasar horas diciendo todo lo que no me gustó. Pero aún así al final sólo estaría recordando detalles que me parecieron chocantes, en lugar de escribir "reacciones". Sinceramente puedo decir que quedé indiferente ante este libro. He seguido varias trilogías que no me gustaban sólo porque siento el impulso tonto de terminar, pero con ésta ni siquiera he sentido la curiosidad suficiente para ir a ver cómo se llama el segundo libro. Lo sabré hasta que busque la portada para ponerla abajo de "Otros libros de la saga".
Dicho eso, pasemos a los personajes. La protagonista es Abby, que se fue de su pueblo -¿Wichita?- con su prima América porque quería alejarse de su pasado, en el libro es la típica chica normal. Ya saben, está en la universidad y eso es sinónimo de decir que va a clase, las lleva masomenos y le gusta emborracharse y bailar, pero trata de mantener una imagen de chica tranquila ¿Cómo lo hace? Simple, se pone suéteres de punto. Boom, sabiduría de Jamie McGuire. Pero resulta que está traumada porque su papá le enseñó a jugar póker y resultó que es buena, lo malo es que su papá se hizo adicto a las apuestas y la culpa de sus problemas. En esto se resume este personaje: se cree el Cristo renacido del póker, invencible, a la vez que alega que quiere alejarse de ese estilo de vida y actúa como si tuviera todo el conocimiento del mundo en sus manos.
El otro protagonista es Travis. Aquí sí se chifló Jamie McGuire, Travis es perfecto en cualquier sentido superficial que quieran cubrir. Es inteligente -un genio-, súper fuerte, súper hábil, es invencible en las luchas, TODAS las chicas quieren con él, etc. Y todas esas cosas sin esfuerzo, sólo se menciona que estudie al principio porque ayudaba a Abby a pasar biología -sólo esa materia se saben aquí, oh, y cálculo-, jamás va al gimnasio, se jacta de no entrenar nunca y por supuesto que tampoco trabaja. Aún así tiene abdominales marcados y dinero suficiente para cosas caras y vivir como loco.
El resto de los personajes también puede describirse totalmente con pocas palabras. America es la chica chismosa, enamorada y fiestera. Shep es el primo de Travis, y él es la versión del chico maduro de este libro-el que les da whisky cuando tienen cruda/jaqueca/gripe/piojos-. Mick es el papá de Abby y es el clásico hombre inútil, va a pedirle dinero a Abby y luego desaparece de la historia. Blablabla.
Sobre la trama, se compone básicamente de un problema tonto, luego Abby se escapa, Travis se enoja o hace un berrinche, y al final Abby lo soluciona con sus poderes de tener suerte.
Una cosa que se me hizo extraña es la forma en que estos personajes beben. No es que yo sea una experta en vida loca universitaria, pero conozco gente "normal" y no se automedican bebiendo whisky por la mañana. Para todo se daban un vaso con "líquido ámbar", si estaban preocupados, si tenían resaca, si los habían golpeado, si estaban medio muertos...
Pero el dedo en la llaga de esta serie es la relación de Abby con Travis. Comienzan siendo amigos, porque Abby no quiere andar con él ya que le recuerda su pasado y le da miedo regresar. Como un tercio del libro se trata de Abby saliendo con otro chico mientras Travis se obsesiona con ella, todo porque America la llevó a vivir al departamento de los chicos porque ellos sí tenían agua caliente. Luego el resto es sobre cómo Abby hace sus cosas, pero Travis es muy posesivo y la asusta, cosa que le recuerda a Abby que no le gustan las apuestas-Travis vive de apuestas en peleas-, entonces ella decide dejarlo pero él no está dispuesto a eso. Dramas, alcohol y tienen sexo. Eso los regresa a su estado de enamorados por siempre. Y esa es básicamente su relación.
Entiendo que es algo insano, pero es que resulta tan ridículo que no puedo ni creérmelo de mentiritas. En serio que se la pasan gritándose y rompiendo cosas, o viéndose con deseo, o teniendo sexo. No puedo ni concebir que tengan lo que la autora dice que tienen y eso me cruza los cables.
No sé qué más decir, siento que me estoy repitiendo sin control. Yo no le recomendaría el libro ni a los fans del género, los personajes son muy simples, la trama no tiene emoción alguna; aunque lo intenta, hubo incendios, amenazas de muerte, un viaje exprés a Las Vegas y casi se mueren...
El final es lo peor. Creo que se supone que fuera algo muy emotivo, una especie de expresión de amor infinita. Pero recurre a la clásica narración en pasado en la que te cuentan los resultados de la última acción de los protagonistas, como si no fuera suficientemente malo.
¿Ya mencioné que Travis nunca la llama por su nombre? No tengo ni idea de cuántas malditas veces leí la palabra Paloma.
*ACTUALIZACIÓN* Después de años de haber escrito la reseña, de hecho vi las sinopsis de los otros dos libros de la trilogía. No son continuaciones, ni para eso dio la imaginación de la autora. El segundo libro es la versión narrada por Travis del primer libro y el tercero es lo que pasó en un viaje de America con Shep. Y además hay dos relatos intermedios, el 1.5 es lo más cercano a una continuación porque trata *SPOILER* del primer San Valentín de Abby y Travis luego de casarse *FIN DEL SPOILER* Y el 2.5 es sobre por qué diablos Abby pensó que era buena idea casarse al final. Ni me molestaré en incluir las portadas de esos libros en la reseña.
En resumen, Maravilloso desastre pasó sin pena ni gloria por mis ojos. La trama es el colmo de la simpleza, los personajes son planos y sin crecimiento.
Y ustedes,¿lo han leído?
¿Piensan hacerlo?
Angie
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También les dejo una selección de emojis, nunca se sabe cuándo vas a necesitar una pizza.
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