Reseña de: {Friday Harbor III} - El lago de los sueños

Título original: Dream Lake
Autor: Lisa Kleypas
Traducción: Paula Vicens
Libro: 3/5
Formato: Tapa blanda con solapas
Páginas: 352
Género: Ficción, Romance, Contemporánea

Sinopsis: Lisa Kleypas nos transporta de nuevo a los hermosos parajes de Fridar Harbor, esta vez para contarnos la historia de Zoë, la dueña de una posada que lo tiene todo pero ha renunciado al amor.
Aunque es una mujer atractiva y romántica, Zoë Hoffman ha sufrido tanto en el pasado que ya no quiere entregar su corazón a nadie. Y mucho menos a Alex Nolan.
Alex es el más atormentado de los hermanos Nolan. Bebe para mantener a raya a los demonios que lo acechan y no es que haya renunciado al amor, sino que directamente no cree en él. Zoë y Alex son como el agua y el aceite, como el hielo y el fuego, como el sol y la sombra. Pero a veces basta un tenue rayo de luz par ahuyentar la oscuridad.
El lago de los sueños tiene todas las cualidades que caracterizan las novelas de Lisa Kleypas: romántica, intensa, emotiva y mágica.

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Lisa Kleypas se está tomando MUY en serio eso de que sus historias tengan magia. No me molestó demasiado la magia que le metió a El camino del sol a pesar de que era descarada, pero en El lago de los sueños de plano se voló la barda, ya no queda ni una pizca de sutileza.
Me voy a echar mi primera ronda de spoilers para no traerlos en la mente mientras escribo. Para empezar, esta sinopsis no lo dice pero la de goodreads sí: Alex es perseguido por un fantasma que vivía en la casa de Rainshadow Road-la casa de Sam Nolan-. El fantasma no recuerda nada de su vida y es trabajo de Alex ayudarle a descubrirlo. Hasta ahí no hay ningún problema, estoy dispuesta a tolerar un fantasma, pero *SPOILER*ya es el colmo que en el final atropellen a Alex y se muera, pero que Dios decide aparecer y le dice al fantasma que puede revivirlo, así que lo revive. Y lo deja ileso, y la señora que lo atropella no dice ni pío a pesar de que le destrozó el coche. *FIN DEL SPOILER*
Mi otro "spoiler" no es grave porque no tiene NADA que ver con la historia, la autora lo metió sólo como "una pista" sobre el próximo libro. Y es que Justine, la prima de Zoë, tiene un aquelarre. Al principio creí que iba a ser algo normal, pero luego de pronto Justine sacó un libro de hechizos que hasta rezumaba cosas viscosas. Y lo dice como si fuera cualquier cosa, actúa igual respecto a tirar maldiciones. Ésos comentarios no pintan nada en este libro, pero lo tolero porque me imagino que es una característica muy fuerte en el personaje, característica que no aparece en el libro anterior, a pesar de que Justine sí participa.

Listo, un poco de la furia salió de mi sistema. Pasemos a los personajes. La protagonista de este libro es Zoë Hoffman. Ella tiene un grave caso de timidez porque es una linda chica rubia, pequeña y voluptuosa, bonita y de buen carácter...ya saben, la clase de personaje que aparece en un libro para que te enamores de él. Su problema es que todos asumen cosas sobre su personalidad debido a su físico -chica voluptuosa-, además de ser la clase de persona que siente la necesidad loca de ayudar.
Otro protagonista es Alex Nolan. Él es el menor de los hermanos, el que se quedó con los papás alcohólicos hasta el final porque era demasiado joven para escapar. No se ahonda tanto en ese aspecto de su pasado, pero en los primeros dos libros nos dan una muy buena idea de su carácter: odioso y borracho. Alex bebe para alejar sus recuerdos, para colmo se acaba de divorciar y su ex-esposa le quitó todo.
La última voz cantante aquí es el fantasma, durante el libro Alex y él se dedican a buscar pistas sobre su identidad, además de tratar de encontrar el asunto que lo está reteniendo, porque el fantasma no tiene la menor idea de por qué se quedó atrapado en la casa de Sam.
Además de ellos Justine y la abuela de Zoë-Emma- son importantes. Justine porque vive con Zoë y Emma porque está íntimamente unida a su nieta, además de estar enredada en la historia de Rainshadow Road.

La trama. Todo comienza porque Alex va a ayudar a Sam a reconstruir su casa, el fantasma lo nota y comienza a retomar conciencia de sí mismo. Hasta que llega un día en que se da cuenta de que puede salir de la casa si sigue a Alex, lo malo es que se queda pegado a él y durante la novela tiene que seguirlo a todas partes.
Luego la abuela de Zoë sufre un derrame o algo así, por lo que decide llevarla a su vieja casa de Friday Harbor para poder cuidarla. La casa del lago es vieja y la inmobiliaria no la ha cuidado como se debe, Justine le sugiere a Alex para arreglarla porque es el único contratista sin trabajo ese verano.
Y esos son los detonantes de la historia. Por un lado tenemos el hilo que siguen Alex y el fantasma, y por el otro tenemos la relación de Alex con Zoë. Aquí es en donde las cosas se ponen complicadas para mí, dividiré mis opiniones sobre esas dos partes.
La primera es la que no me gusta, como ya dije al principio. Ya de entrada es algo que lees dando por sentado, hay fantasmas y eso implica la existencia de otros elementos místicos. Pero no hay ningún otro indicio de eso en este mundo, sólo el hecho de que Lucy-la protagonista anterior- hace cosas con su vidrio y que el ventanal que hizo cambió de colores. Bueno, Lisa Kleypas menciona de Justine es una especie de bruja. Sólo que eso es todo, la magia aparece en el momento en el que conviene para darle un giro imposible a la historia y luego desaparece. Lo siento por los que no lo han leído, pero de verdad necesito un ejemplo para explicarme, y es un spoiler de los imperdonables: es la solución al problema. Osea que si no quieren arruinar el libro, están advertidos. *SPOILER* El último obstáculo en la relación de Zoë y Alex se desencadena porque Emma descubre que el fantasma sigue a Alex, el fantasma es su enamorado de toda la vida, y se sale en la noche al bosque a buscarlo-Emma ya tiene problemas mentales-. Zoë llama a Alex, que la encuentra a media carretera a punto de ser atropellada. Se lanza a rescatarla y se muere en el choque, pero resulta que de pronto Dios aparece y le dice al fantasma que le da permiso de revivir a Alex. Así que lo revive y se van tan campantes a la casa de Zoë, para confesarse su amor y ser felices por siempre. *FIN DEL SPOILER* No sé si Lisa Kleypas se había cansado de escribir, pero ese final estuvo muy mal.

La buena noticia es que ahí se acaban los problemas, la "segunda parte" está bien hecha. Al principio Zoë y Alex no se llevan bien, principalmente porque Alex es un asco de persona y Zoë no está dispuesta a enredarse con alguien. A lo largo de la historia Lisa Kleypas se dedica a introducirnos en la mentalidad de Alex, de modo que sus problemas de carácter tienen sentido. Y cuando le toca a Zoë expresa su pasión por la cocina, le mete muchos detalles a esos momentos, como si por unos instantes vieras el mundo tal como lo percibe Zoë. Lo que quiero decir es que los personajes se mantienen auténticos durante su proceso de enamoramiento, que es todo lo lento que tenía que ser. Primero se tienen que hablar, luego tienen que soportar su mutua presencia, comenzar a hablar, tomarle gusto a sus momentos juntos y ya al final enamorarse. Nada que ver con la parte paranormal de la historia, que está escrita a la brava.

En resumen, El lago de los sueños me molestó por la forma en que se resuelve el nudo de la historia, además de que no me gustan las novelas de romance paranormal. Fuera de eso, no es un mal libro y el enamoramiento de los protagonistas está bien llevado.

Angie